Cap. IV : “EL DÍA DESPUÉS DEL DÍA DESPUÉS DE MAÑANA”
Así que al fin el día había llegado. Finalmente estaban a las afueras de una habitación en donde se encontraba uno de sus sueños más imposibles. Donde quizá, conocerían a su banda preferida. Si jugaban bien sus cartas su sueño se haría realidad. Llámenlo destino, llámenlo suerte…
-Al fin llegamos y nos quedamos afuera del concierto – dijo Mery resignada una vez que se sentaron a escuchar el resto de las canciones.
-Pero, ¿no es miércoles todavía? – preguntó Aye mirándola mientras jugaba con una roquita que estaba en el suelo.
-¿Y entonces?
-Y entonces, - comenzó Aye poniéndose de pie – el concierto es el sábado. Todavía es miércoles… - se detuvo dubitativa por un momento. – A menos que… Sea el miércoles de la semana siguiente, pero… ¿Cómo pasó tanto tiempo sin que nos diéramos cuenta? – finalizó su frase agarrándose el mentón con los dedos pulgar e índice.
-Jodeme que la pensaste en serio – le dijo Mery.
-Admití que tengo razón y puedo ser feliz – contestó Aye sonriendo.
-Tenés razón. – Dijo Mery de mala gana – Debe ser un ensayo.
-¡Ya sé! ¡Debe ser un ensayo! – exclamó Aye triunfante chasqueando los dedos en el aire.
-¡Es lo que acabo de decir! – le dijo Mery agarrándose la cabeza con ambas manos.
-¡Escuchá! – gritó Aye ignorándola por completo – Es “Mad As Rabbits”… -
Mery se puso de pie y ambas apoyaron sus respectivas orejas contra la puerta.
Aye bailaba alegremente, mientras que Mery marcaba el ritmo del compás con uno de sus pies contra el suelo. Ambas cantaban la letra de la canción imitando las caras que pondría el cantante y bajista (la ocasión lo ameritaba) Brendon Urie.
Cuando terminó la canción, se quedaron un rato ahí paradas. Escuchando el silencio que salía de aquella maravillosa habitación.
-Aaahhh – suspiró Aye – Creo que no voy a vivir nada mejor hasta que los vea en vivo y en directo delante de mis ojotes – dijo señalándose ambos ojos.
Mery rió con ganas.
-Mal. Además, ver a Brendon ahí haciéndose el sepsy, tocando el bajo en “Mad As Rabbits” – suspiró también.
-¡Y Jon toca la guitarra! – dijo Aye retorciéndose de regocijo.
Aye comenzó a caminar hacia atrás, y volteó justo para no caerse por las escaleras. Aunque se tambaleó bastante, logró mantenerse en pie.
-Jeje, jeje – la miró a Mery, que estaba toda roja a punto de morir de la risa. – No me caí, ¿viste? –
-Por ahora… - susurró Mery.
Aye dio un paso triunfal hacia delante, pero no todo salió tan bien como esperaba. Jamás vio la valija ahí tirada. Jamás. Así que, básicamente lo que le pasó fue que… Bueno… Je… Se cayó. Y se cayó feo, porque quedó desparramada por encima de la valija, y para sumarle más chistes a la situación, no podía levantarse por el ataque de risa que le acababa de agarrar.
Mery se acercó para tratar de ayudarla, pero al primer intento no pudo. Comenzó a reírse. Entonces Aye, de vengativa que es nomás, cuando Mery trató de levantarla de nuevo la tiró al piso.
Resumen: ambas tiradas encima de la valija, luchando por ver quién caía al suelo primero. Y, ¡ah!, riéndose al mismo tiempo (inténtenlo alguna vez, es gracioso…)
Mientras reían y forcejeaban se abrió una puerta no muy lejos de ellas. Y varias personas salieron de ella. Se podía decir que eran varias por la cantidad de voces que se esparcían por el aire. Hablaban de forma relajada, hasta que una risotada rompió aquella agradable conversación.
Las niñas (?) miraron a su alrededor para encontrarse a un Jon totalmente divertido.
-¿De qué se ríe? – preguntó Mery mirando a Aye.
-De nosotras, ¿de qué se va a reír? – contestó.
Mientras Mery miraba distraída a Jon riéndose, Brendon miraba extrañado a Jon. Evidentemente es tonto en serio y no entendía de qué se podía estar riendo su amigo. Y Aye, sí la muy zorra, atacó por la espalda a Mery y comenzó a picarla. Lo que hizo que tanto ella como Jon se rieran aún con más entusiasmo.
Y así seguían, peleando por ver quién caía primero, hasta que alguien tomó por el cuello de la remera a Mery y la alzó en los aires.
-¡Hey! ¡Tengo patas cortas! – gritó pataleando. Jon tuvo que sentarse en el suelo para no caer de la risa. – Let me go! – agregó al ver que era Zack el que la sostenía.
Aye se revolcaba por el suelo de tanta risa, pero hizo un gran esfuerzo y trató de tacklear a Zack. Resultado: rebotó contra las piernas de Zack y cayó de espaldas al suelo. De nuevo.
Mery seguía revoleando brazos y piernas, entonces Brendon entendió lo gracioso de la situación y comenzó a reírse. Je, bobo…
Fue, finalmente, Spencer quien tomó el valor de acercarse a una muy agresiva Aye que intentaba por todos sus medios hacer que Zack soltara a su amiga. Spencer la tomó por debajo de los brazos y la alzó en el aire, poniéndola de pie.
-¡¿Qué onda?! – dijo mirando a Spencer – Ay, perdón… Digo… Sorry, I didn’t see you there… - terminó rascándose distraídamente la nuca.
-Hello! I’m still over here! – dijo Mery agitando una mano.
-¡Uy! – exclamó Aye, y al darse vuelta fue Zack quién comenzó a reírse.
-So it’s you! – Dijo como si tal cosa – I didn’t recognize you, I’m so sorry. – finalizó.
-Sure, it’s okay… - dijo Mery sacudiéndose la ropa.
-You know them? – Preguntó Rick.
-Yeah, I saw them at New York’s airport – dijo señalándolas una y otra vez.
-Jon, what are you laughing at? – Preguntó Mery.
-I… I… I don’t… know… - dijo tratando de respirar, reírse, y hablar a la vez.
-And you Brendon? – Preguntó Aye.
-I’m laughing at you… What? – agregó al ver la cara de las dos – Now you’re gonna say you never laughed at me? –
-No en tu cara… - susurró Aye.
-Not at your face – dijo Mery en voz alta.
Ryan, que hasta ese momento había permanecido callado (por no decir “escondido en la oscuridad”), sonrió.
-Are you coming to the show? – preguntó Jon una vez que pudo recuperar el aliento.
-Don’t know… There’re tickets left yet? – preguntó Mery, más mirando a Aye que al resto del grupo.
-I think not – acotó Rick.
-Fuck – dijeron ambas a coro y por lo bajo.
-There’re only two of you? – Preguntó Zack.
-What’s that supposed to mean?! – Exclamó Mery, echándole a Zack una mirada incriminatoria.
-We can get you some tickets – dijo Ryan.
-What do you say? – Agregó Brendon.
-Of course we want them! – tuvo que decir Aye, ya que Mery al escuchar la voz de Ryan en vivo y en directo quedó más tarada de lo que ya estaba, y eso es mucho…
-That’s it! You’re coming then… - dijo Spencer aplaudiendo una sola vez.
-Al fin llegamos y nos quedamos afuera del concierto – dijo Mery resignada una vez que se sentaron a escuchar el resto de las canciones.
-Pero, ¿no es miércoles todavía? – preguntó Aye mirándola mientras jugaba con una roquita que estaba en el suelo.
-¿Y entonces?
-Y entonces, - comenzó Aye poniéndose de pie – el concierto es el sábado. Todavía es miércoles… - se detuvo dubitativa por un momento. – A menos que… Sea el miércoles de la semana siguiente, pero… ¿Cómo pasó tanto tiempo sin que nos diéramos cuenta? – finalizó su frase agarrándose el mentón con los dedos pulgar e índice.
-Jodeme que la pensaste en serio – le dijo Mery.
-Admití que tengo razón y puedo ser feliz – contestó Aye sonriendo.
-Tenés razón. – Dijo Mery de mala gana – Debe ser un ensayo.
-¡Ya sé! ¡Debe ser un ensayo! – exclamó Aye triunfante chasqueando los dedos en el aire.
-¡Es lo que acabo de decir! – le dijo Mery agarrándose la cabeza con ambas manos.
-¡Escuchá! – gritó Aye ignorándola por completo – Es “Mad As Rabbits”… -
Mery se puso de pie y ambas apoyaron sus respectivas orejas contra la puerta.
Aye bailaba alegremente, mientras que Mery marcaba el ritmo del compás con uno de sus pies contra el suelo. Ambas cantaban la letra de la canción imitando las caras que pondría el cantante y bajista (la ocasión lo ameritaba) Brendon Urie.
Cuando terminó la canción, se quedaron un rato ahí paradas. Escuchando el silencio que salía de aquella maravillosa habitación.
-Aaahhh – suspiró Aye – Creo que no voy a vivir nada mejor hasta que los vea en vivo y en directo delante de mis ojotes – dijo señalándose ambos ojos.
Mery rió con ganas.
-Mal. Además, ver a Brendon ahí haciéndose el sepsy, tocando el bajo en “Mad As Rabbits” – suspiró también.
-¡Y Jon toca la guitarra! – dijo Aye retorciéndose de regocijo.
Aye comenzó a caminar hacia atrás, y volteó justo para no caerse por las escaleras. Aunque se tambaleó bastante, logró mantenerse en pie.
-Jeje, jeje – la miró a Mery, que estaba toda roja a punto de morir de la risa. – No me caí, ¿viste? –
-Por ahora… - susurró Mery.
Aye dio un paso triunfal hacia delante, pero no todo salió tan bien como esperaba. Jamás vio la valija ahí tirada. Jamás. Así que, básicamente lo que le pasó fue que… Bueno… Je… Se cayó. Y se cayó feo, porque quedó desparramada por encima de la valija, y para sumarle más chistes a la situación, no podía levantarse por el ataque de risa que le acababa de agarrar.
Mery se acercó para tratar de ayudarla, pero al primer intento no pudo. Comenzó a reírse. Entonces Aye, de vengativa que es nomás, cuando Mery trató de levantarla de nuevo la tiró al piso.
Resumen: ambas tiradas encima de la valija, luchando por ver quién caía al suelo primero. Y, ¡ah!, riéndose al mismo tiempo (inténtenlo alguna vez, es gracioso…)
Mientras reían y forcejeaban se abrió una puerta no muy lejos de ellas. Y varias personas salieron de ella. Se podía decir que eran varias por la cantidad de voces que se esparcían por el aire. Hablaban de forma relajada, hasta que una risotada rompió aquella agradable conversación.
Las niñas (?) miraron a su alrededor para encontrarse a un Jon totalmente divertido.
-¿De qué se ríe? – preguntó Mery mirando a Aye.
-De nosotras, ¿de qué se va a reír? – contestó.
Mientras Mery miraba distraída a Jon riéndose, Brendon miraba extrañado a Jon. Evidentemente es tonto en serio y no entendía de qué se podía estar riendo su amigo. Y Aye, sí la muy zorra, atacó por la espalda a Mery y comenzó a picarla. Lo que hizo que tanto ella como Jon se rieran aún con más entusiasmo.
Y así seguían, peleando por ver quién caía primero, hasta que alguien tomó por el cuello de la remera a Mery y la alzó en los aires.
-¡Hey! ¡Tengo patas cortas! – gritó pataleando. Jon tuvo que sentarse en el suelo para no caer de la risa. – Let me go! – agregó al ver que era Zack el que la sostenía.
Aye se revolcaba por el suelo de tanta risa, pero hizo un gran esfuerzo y trató de tacklear a Zack. Resultado: rebotó contra las piernas de Zack y cayó de espaldas al suelo. De nuevo.
Mery seguía revoleando brazos y piernas, entonces Brendon entendió lo gracioso de la situación y comenzó a reírse. Je, bobo…
Fue, finalmente, Spencer quien tomó el valor de acercarse a una muy agresiva Aye que intentaba por todos sus medios hacer que Zack soltara a su amiga. Spencer la tomó por debajo de los brazos y la alzó en el aire, poniéndola de pie.
-¡¿Qué onda?! – dijo mirando a Spencer – Ay, perdón… Digo… Sorry, I didn’t see you there… - terminó rascándose distraídamente la nuca.
-Hello! I’m still over here! – dijo Mery agitando una mano.
-¡Uy! – exclamó Aye, y al darse vuelta fue Zack quién comenzó a reírse.
-So it’s you! – Dijo como si tal cosa – I didn’t recognize you, I’m so sorry. – finalizó.
-Sure, it’s okay… - dijo Mery sacudiéndose la ropa.
-You know them? – Preguntó Rick.
-Yeah, I saw them at New York’s airport – dijo señalándolas una y otra vez.
-Jon, what are you laughing at? – Preguntó Mery.
-I… I… I don’t… know… - dijo tratando de respirar, reírse, y hablar a la vez.
-And you Brendon? – Preguntó Aye.
-I’m laughing at you… What? – agregó al ver la cara de las dos – Now you’re gonna say you never laughed at me? –
-No en tu cara… - susurró Aye.
-Not at your face – dijo Mery en voz alta.
Ryan, que hasta ese momento había permanecido callado (por no decir “escondido en la oscuridad”), sonrió.
-Are you coming to the show? – preguntó Jon una vez que pudo recuperar el aliento.
-Don’t know… There’re tickets left yet? – preguntó Mery, más mirando a Aye que al resto del grupo.
-I think not – acotó Rick.
-Fuck – dijeron ambas a coro y por lo bajo.
-There’re only two of you? – Preguntó Zack.
-What’s that supposed to mean?! – Exclamó Mery, echándole a Zack una mirada incriminatoria.
-We can get you some tickets – dijo Ryan.
-What do you say? – Agregó Brendon.
-Of course we want them! – tuvo que decir Aye, ya que Mery al escuchar la voz de Ryan en vivo y en directo quedó más tarada de lo que ya estaba, y eso es mucho…
-That’s it! You’re coming then… - dijo Spencer aplaudiendo una sola vez.
*Not knowing you'd change for just one bite...*
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